PSA (Antígeno prostático específico)
El antígeno prostático específico (PSA: prostatic
specific antigen) es una proteína sérica producida por las células de la
glándula prostática.
Cuando la glándula de la próstata se agranda, los
niveles del PSA en la sangre tienden a elevarse, ya sea debido a un cáncer o a
condiciones no cancerosas, como la hiperplasia o hipertrofia prostática (agrandamiento
de la próstata), cistitis, vesiculitis seminal, tacto rectal, actividad sexual, stress, etc.
Al envejecer los hombres, las condiciones benignas
de la próstata y el cáncer de la próstata ocurren con más frecuencia.
Ya que el PSA es producido por el cuerpo y puede
ser usado para detectar enfermedades, a veces se le llama marcador biológico o
marcador tumoral, ya que es una prueba confiable para detectar este tipo de cáncer, debido a que tiene una sensibilidad del 65%, una especificidad del 80% y un valor predictivo del 45%.
Un nivel elevado de PSA
sólo identifica a pacientes que estén en mayor riesgo de desarrollar cáncer de
próstata.
Como pauta general, los
siguientes resultados indican una necesidad de control y pruebas posteriores:
o Un
PSA de 4 ng/mL para la mayoría de los hombres
o Para
los hombres menores de 49 años, niveles por encima de 2.5 ng/mL
o Para
los hombres de 50 a 59 años, niveles por encima de 3.5 ng/mL
o Para
los hombres de 60 a 69 años, niveles por encima de 4.5 ng/mL
o Una
elevación significativa de un año al siguiente también puede indicar un riesgo
más alto de tener cáncer de próstata
o Los
afroamericanos y asiáticos americanos pueden necesitar pruebas de control si
tienen niveles de PSA más bajos
o Un
PSA que cambia rápidamente, incluso dentro del rango normal, aumenta la
probabilidad de cáncer.
También puede detectarse el cáncer de próstata
cuando se realiza un tacto rectal. Debido a que la glándula prostática se
localiza justamente delante del recto, con el tacto rectal se puede apreciar si hay nódulos o
áreas de consistencia dura (leñosa) en la próstata que indican a menudo que
existe un cáncer. Si estas pruebas se realizan anualmente de rutina y alguno de
los resultados fuera anormal, tenemos la probabilidad de diagnosticar un cáncer
en estado precoz.
La biopsia prostática puede determinar con mucha
certeza la presencia de Cáncer cuando este está muy avanzado.
La ecografía protática convencional: Permite tener
una idea aproximada del tamaño de la próstata pero debido a su baja
sensibilidad se acostumbra asociarla a Biopsia de próstata, con las graves consecuencias
que esta acarrea.
El cáncer de próstata se produce cuando algunas células
prostáticas mutan y comienzan a multiplicarse descontroladamente. Éstas
también podrían propagarse desde la próstata a otras partes del cuerpo,
especialmente los huesos
y los ganglios linfáticos originando una metástasis.
La enfermedad se desarrolla más frecuentemente en
individuos mayores de 50 años.
Las manifestaciones del cáncer de próstata son más
evidentes a medida que el cáncer avanza, y en sus etapas iniciales es
totalmente asintomático.
Usualmente cuanto más avanzado el cáncer, mayor
número de síntomas y mayor su intensidad. Los más frecuentes son:
o dificultad
o dolor al orinar
o chorro
débil
o goteo
o deseos
frecuentes de orinar
o sangre
en la orina
o sangre
en el semen
o dolor
lumbar probable si hay siembras -metástasis- en la columna vertebral.
o dolor
al eyacular
o dolor
en la cadera
o dolor
en los muslos
o dolor
en los testículos, o cerca a ellos
o PSA
elevado
La American Cancer Society recomienda que los
varones de 50 años o más deban realizarse la prueba una vez al año.